Lo cierto es que el 90% de las parejas tienen peleas de vez en cuando, y esto no es algo que sea agradable. Por esta razón te traemos el mejor método para acabar con las peleas de pareja.
El Día a Día y las Peleas de Pareja
Es muy común que paguemos con nuestra pareja (que no tiene la culpa) toda la ansiedad y el estrés que nos generan el trabajo y otros sucesos del día a día. Pero debemos saber que esas discusiones no deben convertirse en una pelea que llegue a herir los sentimientos de ambos.
Suele pasar que tener un mal día en el trabajo, discutir con un compañero o con un amigo, hace que sin darnos cuenta, nos llevemos el mal humor a casa. Lo que provoca que muchas veces acabemos discutiendo con nuestra pareja de temas que ni siquiera le interesan, únicamente porque no hemos sido capaces de deshacernos de los nervios y la rabia que hemos acumulado durante el día.
Es completamente normal, y además saludable, hablar y compartir con nuestra pareja los problemas que nos han surgido a lo largo del día. Pero si nos encontramos en un estado especialmente irascible, comportamientos a los que estamos más que acostumbrados pueden sacarnos de quicio. Y este sentimiento fomenta las peleas y los enfados entre nosotros y nuestra pareja.
Discutir es Natural, pero Hay que Hacerlo Bien
La especialista en relaciones de pareja y psicología femenina, Harriet Lerner, comentó lo siguiente en una entrevista para el Psychology Today,
El matrimonio es el pararrayos que absorbe la ansiedad y el estrés del resto de fuentes, pasadas y presentes. Después de todo, ¿para qué está nuestra pareja?
La psicóloga Harriet Lerner para Psychology Today
Y la doctora continuó
Cuando un matrimonio tiene una sólida base de amistad y de respeto mutuo puede tolerar una cantidad justa de emoción en estado puro.
Afirmaciones de la doctora Harriet Lerner
Pero nunca debemos descargar nuestra rabia contra nuestra pareja, ya que no es la solución, puesto que las peleas solo generaran tensiones y problemas en la pareja.
Si se Hace Bien, Discutir es Incluso Saludable
Una discusión bien enfocada puede descargar el ambiente de tensiones y a nivel personal nos ayuda a saber cómo sobrevivir a los conflictos. Aunque la doctora Harriet Lerner también afirma que todo tiene su momento y debe llevarse a cabo en su justa medida.
Hay parejas que entran en peleas y discusiones infinitas que únicamente les llevan a culpar a la otra persona de las cosas más insospechadas.
Debemos tener cuidado con las peleas descontroladas e irracionales que pueden debilitar el amor y el respeto que son la base de cualquier relación exitosa.
Advierte Lerner
A menudo actuamos como si el grado de enojo nos diera voz o permiso para tomar cualquier acción, porque después de todo, estamos tan enfadados que no podemos detener todo lo que sale de nuestra boca.
Es necesario establecer ciertas normas que nos ayuden a responsabilizarnos de los sentimientos del otro, incluso en los momentos más duros de la discusión.
Algunas de estas normas podrían ser, por ejemplo, que no se deba gritar y menos insultar, no hacer comparaciones dolorosas con cómo eran las discusiones o la vida en general con anteriores parejas. Una muy buena decisión puede ser algo tan simple como prohibir la posibilidad de empezar una pelea ante de la hora de dormir y de paso eliminamos la posibilidad de una noche incómoda y un despertar lleno de rencores.
Una vez que tengamos estas normas claras, los expertos en terapia de pareja sugieren incluso que se escriban estas reglas en un papel para que se puedan ver todos los días. Ya sea que discutamos o no, es importante que estas normas siempre estén presentes. Si se respetan y se siguen las reglas establecidas, los turnos de palabra, etc. será una charla positiva incluso en el caso de ser algo acalorada, fortaleciendo así la relación.